
4 Pasos Básicos para Convertir Visitantes en Clientes
Tema crucial en el preciso momento de querernos comer al mundo con nuestro producto o servicio a través del tan afamado comercio electrónico (e-commerce), es la dinámica que debemos seguir para que quien visite nuestra web, blog o la fanpage de Facebook pase de ser un simple visitante a un cliente potencial que nos ame y quiera quedarnos con nosotros in secula seculorum…
En el mundo del marketing digital y de nuestra estrategia consentida Inbound Marketing, existe el famoso «embudo de marketing» tan necesario para desarrollar una estrategia precisa donde no dejemos nada de lado ni mucho menos al azar.
El embudo del marketing no es otra cosa que una consecución de pasos lógicos y muy gráficos que hay que seguir en aras a cerrar nuestro proceso de venta en cada una de las plataformas donde nuestro servicio/producto se encuentra alojado y disponible.
Hay quienes han desarrollado más de los 4 pasos que te presentaremos a continuación, atendiendo también todo cuanto sucede en el proceso después de la compra de tu servicio/producto. Nosotros, nos limitaremos a los primeros 4 pasos que, obligadamente, tenemos que dar para convertir visitantes en clientes:
- Atrae. Importante y esencial resulta elegir los canales ideales (web, blog, Facebook, Instagram y claro, también Twitter con todo y su matiz intelectual). El mandamiento principal será: «Genera tráfico a como dé lugar». Según un reciente estudio publicado por METRICOOL -gran herramienta para analizar y medir el éxito de tu contenido digital- si quieres ganar visitantes, es necesario que publiques con más frecuencia. Si hablamos de Facebook, 2 publicaciones diarias no estarían mal. Instagram, con una es más que suficiente. Twitter, entre 5 y 6 publicaciones. Y si tienes ya un sitio web o un blog hermosamente diseñado, publica entre 1 y 2 artículos por día. ¿No tienes página web? ¡A qué esperas! A diseñarla.
- Conquista. Ya sumaste seguidores, visitantes y likes en tus plataformas las primeras semanas, ya atrajiste la atención de ese público que te necesita y te busca constantemente en los motores de búsqueda. Ahora, produce contenido rico, inteligente, útil. El contenido es la médula espinal en cualquiera de las estrategias del Inbound Marketing. Alimenta de artículos, notas de interés, infografías y buenas fotografías todos los canales de los que dispones para dar a conocer tu producto.
- Formaliza la relación. Ya que ganaste la atención y te presentas como una solución a la necesidad de tu visitante, hazle ver, de la mano de la creatividad, que no solo eres una solución sino la solución, la mejor de todas. Crea contenidos exclusivos para los que están a punto de ser tus clientes. Muestra interés en la relación con el email marketing (una postal el día de su cumpleaños podría hacer la diferencia). Pero hay una regla de oro: no seas invasivo ni excesivo. Hay que dar poco, pero con sobrada calidad.
- Llámalo «cliente». Seguramente y si seguiste los pasos en este proceso conquistador, habrás ganado un nuevo cliente que mostrará interés en tu servicio/producto, te contactará y se enganchará a ti. Ahora dependerá de ti y de posteriores estrategias mantener por mucho tiempo esta relación. Porque si no existe un momento de análisis del proceso, podrás dejar pasar nuevas oportunidades o cometer los mismos errores.
¡A la conquista!

